lunes, 22 de febrero de 2016

La química: el funcionamiento del universo, de los seres vivos y las actividades humanas


Pocas veces escribo sobre un libro, en esta ocasión se trata de la presentación realizada en la XXVII Feria Internacional del libro del Palacio de Minería el domingo 21 de febrero.


El Libro es una recopilación del simposio que se realizó el 19 de marzo del año pasado.
Cuenta con la participación de notables Científicos en diferentes áreas de Investigación como son:

La Psicóloga MaríaElena Medina-Mora 
El Biólogo Antonio Lazcano Araujo 
Los químicos Attila Pavlath y Eusebio Juaristi 

Como lo indica el prólogo se pueden leer desde aspectos generales hasta el punto de vista particulares, lo que le da un carácter singular a la publicación.
Si se buscara una descripción general del texto diría que la QUÍMICA es la ciencia que ha roto todos los paradigmas y que al lograrlo nos permite desde entender el universo hasta realizar las modificaciones que se deseen a cualquier substancia.
Inicia con la síntesis de los elementos químicos y nos permite adentrarnos a preguntas fundamentales como la edad del Universo explicando de manera realmente accesible como podemos conocerla considerando aspectos fisicoquímicos como la temperatura. Este recuento de hechos es una invitación para resolver ecuaciones sencillas que nos permiten aproximarnos al momento en el que ocurrieron algunos hechos y entender algunas cosas como por ejemplo los 118 elementos químicos que actualmente forman nuestra tabla periódica. O tal vez en las estrellas exista un mayor número.
También permite predecir lo que pasará después de que las reacciones nucleares para producir helio terminen y cómo podemos pasar a elementos más y más pesados así como de la producción de energía a la disminución del calor.
Se explica en este libro porque existen tantos elementos presentes en diferente abundancia sin embargo porque en el espacio se producen muy pocos compuestos químicos.
Después del Universo podemos regresar a la tierra y empezar por considerar los elementos que la conforma; porqué a pesar de la evidencia reconocida de la tabla periódica llena hasta el 7º periodo menos de 10 componen (ojo sin contar su atmosfera).
También muestra lo cotidiano que puede ser la química en nuestras vidas. Desde ver las estrellas hasta conocer los componentes esenciales que nos hacen la vida actual posible y lo que esperamos para el futuro (tal vez un mundo en el que se produzca la energía de manera limpia y sustentable).
Encontramos algunos aspectos históricos relacionados con científicos que tuvieron contribuciones interesantes por sus conocimientos de química o aun prescindiendo de ellos.
Contiene elementos que nos hablan de cómo se rompen los paradigmas teniendo personajes como Paracelso que se atrevió a utilizar procedimientos poco ortodoxos para la práctica médica o Watson y Crick quienes fueron galardonados con el premio Nobel en fisiología o medicina en 1962 siendo Watson biólogo y Crick físico, logrando entender a nivel molecular la estructura de los ácidos nucleicos apoyándose en trabajos previos, logrando entender cómo funcionan los genes. Sin más elementos que un origami.
Aun cuando un químico podría desarrollar el texto involucrando los esquemas que estamos acostumbrado para describir todas las transformaciones, desde las reacciones nucleares hasta la síntesis de drogas de diseño éste no es su objetivo. Por lo que las únicas reacciones químicas descritas son aquellas que tienen mecanismos muy peculiares y que no se llevan a cabo de la misma manera en nuestro planeta.
Contiene ilustraciones muy bonitas que van más allá de la descripción del texto. En algunos momentos parece muy optimista y la carrera contra el tiempo pareciera que la podríamos superar tal vez con un auto que utilice agua como combustible (en realidad hidrógeno producido por hidrólisis del agua).
Discute la química prebiótica como se origina en el espacio entre las estrellas y en la tierra. Lo que permite vislumbrar que ésta investigación está vigente.
Se repite en dos ocasiones una frase de la cual estoy parciamente de acuerdo y es la siguiente:

Los átomos equivalen a las letras del alfabeto (que son 27) y las moléculas a las palabras (que son un número mucho más grande).

Podríamos extrapolar esta metáfora para decir que la vida es como la poesía: una combinación de moléculas (palabras) que presentan un comportamiento impredeciblemente mucho más complejo que las partes que las componen (las letras).
Comentario personal:
Tal vez para la poesía como para la vida hay que acomodar las palabras exactas, la rima perfecta y que tengan además el ritmo que nos dé la sensación correcta.
En realidad en lo personal una reacción química se puede ver como un verso y la síntesis total sería un poema.
Por lo que la vida definitivamente debe ser algo mucho más complejo que una novela.